2011
Autor: Jamie McGuire
Título Original: Beautiful Disaster
Autor: Jamie McGuire
Título Original: Beautiful Disaster
Título Español: Maravilloso Desastre
-Es. gracias a LDC
LA CHICA BUENA
Abby Abernathy no bebe, no se mete en líos y trabaja muy duro. Cree que ha enterrado su oscuro pasado, pero cuando llega a la universidad, un rompe corazones conocido por sus ligues de una noche pone en jaque el sueño de una nueva vida.
EL CHICO MALO
Travis Maddox, sexy, musculoso y cubierto de tatuajes, es justamente el tipo de chico que atrae a Abby. Y precisamente lo que quiere evitar.
Dedica sus noches a ganar dinero en un club de lucha itinerante, y sus días de ser el estudiante ejemplar y el seductor más popular del campus. Una mezcla explosiva.
¿UN DESASTRE INMINENTE...
Intrigado por el rechazo de Abby, Travis intenta colarse en su vida proponiéndole una apuesta que trastocará sus mundos y lo cambiará todo.
...O EL INICIO DE ALGO MARAVILLOSO?
...O EL INICIO DE ALGO MARAVILLOSO?
En cualquier caso, Travis no tiene la más mínima idea de que ha iniciado un tornado de emociones, obsesiones y juegos que les terminará haciendo daño..., aunque puede que también los una para siempre.
-Sinopsis de mi libro, editorial SUMA
Frases
"-No estoy seguro de qué haría sin ti - dijo, sujetándome con una mano, mientras se desabrochaba el cinturón con la otra-, pero no quiero averiguarlo jamás. Eres todo lo que siempre he querido, Pidge."
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"-¿Por qué demonios ibas a querer que me quedara contigo, en cualquier caso? - pregunté. Travis se encogió de hombros y se metió las manos en los bolsillos.-No sé. Todo es mejor cuando estás tú."
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"-Un brindis, - gritó (...)-A los idiotas, -dijo él haciendo un gesto hacia Brad-, y a las chicas que rompen tu corazón. -Él inclinó su cabeza hacia mí, sus ojos perdieron concentración-. y al absoluto y horrible horror de perder a tu mejor amiga porque fuiste lo suficiente estúpido para enamorarte de ella.-"
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"Golpeé el colchón con mis puños, -¡No puedes decirme que hacer Travis! ¡No te pertenezco!Un segundo le tomó volverse y encararme, su expresión se había contorsionado con rabia, él se acercó a grandes zancadas hacía mí, poniendo sus manos sobre la cama y acercándose a mi rostro.-¡BUENO, YO TE PERTENEZCO! -Las venas de su cuello sobresalían mientras gritaba, me encontré con su mirada, negándome siquiera a parpadear. Él miró hacia mis labios, jadeando-, Te pertenezco, -susurro(...)"
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